Caballo embalsamado (¿Muerto o vivo? Ud. decide!) colgando de la espiral del Guggenheim, New York. De la obra de Maurizio Cattelan. Foto de http://www.lanacion.com.ar/1436825-por-que-le-habran-puesto-caballos
¿Maurizio Cattelan abandona mientras está ganando o antes de quedar demasiado rezagado? La pregunta sobrevuela la muy anticipada retrospectiva de 21 años del Guggenheim donde, como es ampliamente sabido a estas alturas, todo el arte está suspendido en el aire. Esta muestra inusual ha sido descripta por Cattelan como "su canto de cisne". Aunque sólo tiene 51 años, lo que en años artísticos es poco, ha anunciado que se retira del trabajo de hacer arte. Quizá para celebrar, ha convertido su retrospectiva en un estallido, hecho de piezas anteriores -128, para ser precisos-, lo que exige una delicada ingeniería. Toda la producción de Cattelan, salvo dos obras cuyos dueños se negaron a prestarlas, cuelga en una masa gigante distendida de cables conectados a una viga de aluminio cerca del techo de la rotonda del museo. Titulado Todo , llena uno de los vacíos arquitectónicos más grandes del mundo con lo que sin duda figurará como uno de los móviles más complicados y visualmente fallidos de la historia del arte.(....)
Visto desde abajo especialmente, Todo es un catálogo completo razonado, en la forma de una piñata explotada. Al ascender la rampa, el caos continúa: todo parece venirse hacia uno a la vez. Desplegadas aquí y allá, por ejemplo, hay piezas conceptuales de sus primeros años de "estética relacional".
Fragmento de la nota de Roberta Smith (The New York Times). Traducción de Gabriel Zadunaisky.
Las siguientes fotos son del New York Times:
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